domingo, 4 de diciembre de 2016

Las matemáticas de Eloisa

Hola cariño,

¿Qué tal por allí arriba? Aquí mejor de lo previsto. He vuelto a salir de casa y a buscar gente con la que hacer cosas. Quiero contarte que no he encontrado a nadie que me haga sentir como tú. Pero he conocido a una persona que sí que me hace sentir bien. Con él me río y recuerdo un poco lo que era ser feliz. Incluso últimamente, cuando me besa, consigue a veces que no piense en ti. Y me quiere tanto que no le importa que seas mi tema de conversación. También quiero que sepas que no le quiero como a ti. Hiciste que mi corazón creciera tanto que en él siempre tendrás un reservado. Y que él no te ha reemplazado, ni nadie lo hará nunca. Porque es pura matemática: primer amor sólo hay uno.

No sé exactamente si eran mariposas, pero estaban ahí sin que yo las llamara; cada vez que te acercabas, ¡revoloteaban!. Eran tuyas pero estaban en mi estómago...

—¿Signo del zodiaco? —Acuario, pero con mariposas en lugar de peces.

—¿Signo del zodiaco? —Acuario, pero con mariposas en lugar de peces.
"Mariposas en el estómago", vaya metáfora de mierda. Más bien parecen abejas asesinas.

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